miércoles, 19 de agosto de 2015

¡Las Retahílas!



¡Bienvenidas lectoras! Hoy les traemos un recurso que sirve mucho para nuestros párvulos, una ayuda para aprender a contar: Las Retahílas:

Las retahílas infantiles son esas pequeñas piezas poéticas en las que se adivina que la percepción del mundo que tienen los niños dista mucho de la nuestra: versos incomprensibles para un adulto, porque no se organizan en torno a un significado simbólico, sino que lo hacen buscando el ritmo, un gesto, la libre asociación fónica, convirtiéndose así en juguetes orales al servicio de esa comprensión diferente de la realidad. La retahíla popular es un juego de palabras típicamente infantil que beneficia la fluidez verbal, así como también la atención y la memoria.
Es un buen ejercicio para los niños aprenderse de memoria las retahílas mientras juegan y las cantan con sus amigos de la escuela o con los familiares. Lo más importante es aprender mientras se hacen actividades divertidas.

Contar hasta 20 con 5 dedos:

  • Aceituna,
    medialuna,
    pan caliente,
    diecinueve
    y veinte.
  • Candil,
    bujía,
    aceite,
    diecinueve
    y veinte.

Contar hasta 20 con 10 dedos:
  • Dice uno, dice dos, dice tres, dice cuatro, dice cinco,... dieciséis, diecisiete, dieciocho, diecinueve y veinte.
  • Diez y uno, diez y dos, diez y tres, diez y cuatro, diez y cinco,... dieciséis, diecisiete, dieciocho, diecinueve y veinte.
Contar hasta 20:

  • Uni, doli,
    teli, catoli,
    quile, quileta,
    estando la reina
    sentada en su silleta
    vino el rey
    le apagó el candil,
    candil, candol,
    cuenta las veinte
    que veinte son.
  • Una, dola,
    tela, catola,
    quila, quilete,
    estando la reina
    en su gabinete,
    vino Gil,
    apagó el candil,
    candil candilón,
    cuéntelas bien
    que las veinte son…
     

Con los dedos de 1 mano:

  • Este dedo pide pan,
    éste dice que no hay,
    éste dice que amasemos,
    éste dice que compremos,
    y el pícaro gordo...
    ¡que nos lo comeremos!
  • Este compró un huevo,
    éste encendió el fuego,
    éste trajo la sal,
    éste lo guisó
    y éste pícaro gordo
    se lo comió.
  • Éste, chiquitito y bonito
    éste, el rey de los anillitos,
    éste, tonto y loco,
    éste se marchó a la escuela
    y éste se lo come todo

Otros:

  • A la vuelta de mi casa,
    me encontré con Pinocho,
    y me dijo que contara
    hasta ocho.
    Pin, uno, pin, dos,
    pin, tres, pin, cuatro,
    pin, cinco, pin, seis,
    pin, siete, pin, ocho...
  • Todos cuentan hasta tres
    en la casa de Andrés
    uno, dos y tres.
  • Todos cuentan hasta cuatro
    en la casa de Renato
    uno, dos, tres y cuatro.
  • Todos cuentan hasta cinco
    en la casa de Francisco
    uno, dos, tres, cuatro y cinco.
  • Todos cuentan hasta seis
    en la casa de Rubén
    uno, dos, tres, cuatro, cinco y seis.
  • Una vieja mató un gato
    en la calle veinticuatro;
    un, dos, tres,
    el que caiga en dieciséis,
    uno, dos, tres, cuatro,...